Cada persona experimenta la terapia regresiva de manera única. Sus beneficios dependen de las vivencias y el nivel de preparación del alma para encarnar en esta realidad. Sin embargo, todos los que se sumergen en este proceso obtienen claridad, sanación y una mayor conexión con su esencia.
La terapia regresiva es una poderosa herramienta de autodescubrimiento que nos permite acceder a recuerdos de vidas pasadas, sanar bloqueos emocionales y encontrar respuestas a preguntas profundas sobre nuestra existencia.